🌀No vine a encajar, vine a ser🌀

> Me dijeron que debía ser tranquila, que debía encajar, que no fuera “tan intensa”, que no soñara en grande. Que lo seguro era mejor que lo incierto, que lo correcto era mejor que lo auténtico. Me dijeron que debía hablar suave, no incomodar, no destacar tanto. Pero qué suerte que no hice caso. Porque no nací para ser molde, nací para ser esencia. Fui rebelde con mis silencios. Y también con mi voz. Decidí ser la versión de mí que se permite dudar, pero también brillar. No soy perfecta, pero soy real. Y eso —por fin— me basta. Hay libertad en ser lo que muchos no esperan. Y arte en no pedir permiso para existir. —Sara García